7 de julio de 2017
RíO NEGRO
Se despertó una causa sobre la central térmica de Río Turbio
La Justicia Federal de Río Gallegos hizo lugar a un viejo recurso de amparo para que el ejecutivo nacional y provincial hagan cumplir a la empresa Isolux Corsan el estudio de impacto ambiental y mecanismos de participación ciudadana previstos antes de poner en marcha la central térmica a carbón de Río Turbio
“Después de más de diez años de venir denunciando el incumplimiento de la ley ambiental en la construcción de la mega usina y después de dos amparos, el último de febrero de 2014, habiendo un dictamen técnico por irregularidades y omisiones graves, la Justicia hace lugar a nuestro reclamo”, informó el abogado José Luis Janezak.
El amparo había sido promovido por la Asamblea Ambiental Ciudadana deRío Gallegos contra el entonces Ministerio de Planificación Federal y la Subsecretaría de Medio Ambiente de la provincia.
La resolución del juez federal subrogante Javier Leal de Ibarra, establece que “en forma previa a la puesta en funcionamiento de la central termoeléctrica Río Turbio deberá la empresa adjudicataria (Isolux Corsan) culminar de forma íntegra con el procedimiento de Evaluación de Impacto Ambiental, resolviendo las observaciones formuladas por la autoridad administrativa y garantizado la participación ciudadana en dicha etapa en trámite”.
Una acción de amparo anterior había sido rechazada por la Justicia Federal en 2007, por considerarla prematura, cuando la obra estaba en proceso de licitación.
El letrado ambientalista recordó que el EIA presentado por Isolux Corsan, la empresa adjudicataria de la obra, se había limitado al impacto de la construcción, “cuando en realidad lo que importa es cómo va a impactar cuando esté funcionando”, explicó.
La demanda ambientalista apunta a dar respuesta al destino o disposición final de las 1.800 toneladas de cenizas contaminadas con metales pesados y elementos radiactivos que, -esgrime- generará diariamente la usina como también, de las 24.000 toneladas de gases contaminantes salidos de la chimenea, producto de la quema del carbón.
“Era básico y necesario por lo menos dar cumplimiento a la ley ambiental, más allá de los cuestionamientos que teníamos, por los sobreprecios, las alternativas tecnológicas más sustentables que existían en cuanto a la viabilidad técnica que también estaba en dudas”, dijo Janezak quien consideró a la resolución judicial “una muy excelente noticia que esperábamos hace más de diez años”.
El letrado advirtió probable que la resolución sea apelada, aunque se mostró confiado en que la medida será ratificada por la Cámara de Apelaciones de Comodoro Rivadavia.