19 de agosto de 2024
ENERGIA
Mediante presentación judicial, la ciudad de Neuquén busca meterse en la discusión de las represas
El subsecretario de Medio Ambiente y Protección Ciudadana de la capital provincial, Francisco Baggio, anticipó que el municipio irá a la Justicia Federal por sufre graves consecuencias en la ciudad por la crecida del río Limay, generada para abastecer de energía a Buenos Aires. Exigen participar en el Plan de Manejo del Agua para evitar inundaciones y daños ambientales
La Municipalidad de Neuquén anunció que realizará una presentación en la Justicia Federal para cuestionar el manejo discrecional de las represas hidroeléctricas, argumentando que este control ha generado graves consecuencias urbanas, ambientales y sociales en la ciudad. La intención es que el municipio sea considerado una parte necesaria en el Plan de Manejo del Agua.
Esta medida se impulsa a raíz de un parte meteorológico que anticipa fuertes lluvias en la capital neuquina, lo que podría agravar la ya complicada situación de drenaje hacia el río Limay, cuyas aguas están artificialmente crecidas.
“No puede ser que la ciudad de Neuquén pague estos costos para que otras ciudades tengan energía”, expresó Francisco Baggio, subsecretario de Medio Ambiente y Protección Ciudadana, al referirse a la sostenida crecida del caudal del río Limay, que se ha mantenido en 900 m³/s durante al menos 45 días, con el objetivo de generar electricidad para Buenos Aires y el conurbano bonaerense.
Baggio reconoció la existencia de un debate en torno a la reprivatización de las represas, pero enfatizó que, en cualquier escenario, Neuquén capital debe ser parte de la discusión, motivo por el cual se presentará la demanda judicial.
El subsecretario también destacó otra problemática urgente: la inminente llegada de lluvias intensas y la dificultad para drenar el agua hacia el río Limay, lo que podría generar inundaciones en varios barrios. Según Baggio, el caudal natural del río debería estar en torno a los 300 m3/s en esta época, en lugar de los 900 m3/s actuales.
“Hoy tenemos crecidas en pleno invierno que responden a la demanda eléctrica de Buenos Aires y el conurbano. Queremos que se rediscuta el Plan de Manejo del Agua para que Neuquén pueda ser parte del proceso”, subrayó Baggio.
El funcionario también señaló que el manejo actual de las represas ha causado la inundación de espacios públicos como el Parque Agreste y la Reserva Natural Hiroki, los cuales permanecen cerrados al público. Comparó esta situación con la posibilidad de que Neuquén decidiera inundar la Reserva Ecológica de Buenos Aires sin considerar las consecuencias para los habitantes de la capital.
Finalmente, Baggio mencionó los costos sociales y económicos de este manejo, incluyendo daños en las costas y en las tomas de agua. Resaltó que las fluctuaciones en el caudal del río han afectado los sistemas de bombeo de agua potable en el sector sur de la ciudad, generando problemas tanto en épocas de bajante como de crecida.